Para llegar a Tampa, hicimos una pequeña escala en el aeropuerto de Nueva York, y para la vuelta, partimos en un vuelo directo desde el aeropuerto de Miami.
El día de la inscripción, aún no hay charlas ni actos, lo aprovechamos para ver juntos parte de la ciudad y descubrir zonas del hotel de las que disfrutaríamos estos días, como por ejemplo la piscina situada en la tercera planta….. una delicia para esas tardes calurosas.
El downtown de la ciudad no es muy grande y, como en muchas ciudades de Estados Unidos, hay edificios más antiguos que contrastan con los grandes rascacielos, así ocurre con el edifico del Ayuntamiento de Tampa.
El Tampa Bay Hotel un enorme edificio de estilo árabe que hoy forma parte de las instalaciones de la Universidad de Tampa, aunque en una de sus alas conserva un pequeño museo que exhibe parte del mobiliario y objetos con los que contaba este lujoso hotel, la visita la haría yo más adelante mientras Diego asistía a la conferencia, así que hablaré de él en otro momento.
Justo enfrente de nuestro hotel tenemos una de las paradas del tranvía que lleva al histórico barrio de Ybor City, así que compramos un ticket en una de las máquinas expendedoras y en cuanto llega nos subimos!!!
A principios de los 80, el área comenzó una lenta recuperación, primero como refugio para artistas y después como un distrito popular de entretenimiento y vida nocturna en los 90. Desde el año 2000 se han construido nuevas viviendas y la población poco a poco va aumentando.
Es una zona con cierto encanto, con lugares de entretenimiento y restaurantes de comida italiana, cubana…Merece la pena pasear por su calle principal la 7th Ave y ver los negocios de puros que aún siguen abiertos, así como otras tiendas de souvenirs. Su arquitectura es particular, más parecida a alguna zona del oeste americano.
Para comer elegimos uno de los restaurantes más famosos del barrio, Carmine’s donde compartimos el típico sándwich cubano y una croqueta enorme de carne de cangrejo un poco picante que es su especialidad.
En el cruce de la 8th Ave con la 19St, todavía se conservan algunas antiguas casas de madera. Cerca podemos ver un monumento en homenaje a los inmigrantes.
Volvimos a tomar el tranvía y esta vez nos bajamos en la parada que hay cerca del Aquarium para visitar uno de los barcos construidos por los americanos para la Segunda Guerra Mundial.
S.S. American Victory es un barco construido en Los Angeles en 1945 para la Segunda Guerra Mundial, pero cuando el barco llegó a Japón, la guerra ya había terminado. Después fue utilizado para llevar alimentos y maquinaria a Europa bajo el Plan Marshall, que ayudaba en la reconstrucción de Europa tras la Segunda Guerra Mundial. También fue utilizado por líneas comerciales durante la Guerra de Corea y posteriormente entró en la flota de reserva de los Estados Unidos. Hoy en día es un museo en el que puedes ver las diferentes partes de un buque de guerra.
En los días siguientes que estuvimos en la ciudad de Tampa, mientras Diego asistía a la conferencia, yo utilizaría las mañanas para visitar otras zonas de la ciudad y por las tardes aprovecharíamos la piscina del hotel. En el próximo relato hablaré de todas las cosas que visité en esos días, entre las que se se encuentra un museo de bomberos!!!