El glaciar Stubai se encuentra a tan sólo 40 kilómetros de Innsbruck y es un lugar donde se puede esquiar durante todo el año con más de 100 kilómetros de pistas para todos los niveles. Da nombre a todo el valle, Stubaital (Valle del Stubai) y aunque no se vaya a esquiar, merece la pena acercarse hasta allí y subir en uno de sus muchos funiculares y llegar hasta el «Top of Tyrol» a 3210 metros de altura, para disfrutar de unos paisajes nevados espectaculares, eso sí, hay que abrigarse bien pues allí arriba el frío es de verdad.
A primera hora de la mañana dejamos nuestro hotel en Innsbruck y ponemos rumbo al Stubaier Gletscher (Glaciar de Stubai), para ese día no pagamos el desayuno del hotel y decidimos parar en uno de los pueblecitos por donde pasamos y tomarnos un café caliente con unas tostadas. El día había amanecido algo lluvioso y se notaba que nos estábamos acercando al glaciar, pues cada vez veíamos más nieve en las montañas.